Mucho cuidado con una sustitución de bañera por plato de ducha no realizada por profesionales en reformas y construcción, ¿y por qué? Pues porque existe un gran problema cuando se llevan a cabo sin criterio: los azulejos. ¿Qué hacemos con ellos? ¿Cómo reponemos si no tenemos piezas de sustitución? Es el típico pequeño detalle que no se tiene en cuenta cuando se aborda esta intervención y que puede hacer que todo salga mal.
En ocasiones, la empresa constructora que ha realizado la obra original deja un resto de un 10% del alicatado para sustituirlo en una situación como esta. El perímetro de la bañera, al retirarlo y convertirlo en un plato de ducha, exige cubrirlo. Sin embargo, muchas veces este resto no llega o hay que rediseñar el propio espacio. Y como no siempre tenemos ese 10%, cambiar la bañera por plato de ducha exige cambiar los azulejos de todo el baño y meterse en una reforma más grande.
Cambiar la bañera por un plato exige pensar también en los azulejos
Es decir, la sustitución de bañera por ducha, para hacerse bien, requiere de un estudio del espacio; tanto es así que, muchas veces, podemos estar hablando de realizar la reforma de un baño pequeño más que de un cambio de bañero por plato de ducha. Esto no es algo malo, al contrario, es una oportunidad para dejar tu baño perfecto y adaptarlo a tus necesidades actuales.
Si vives en Vitora-Gasteiz, en DMado llevamos más de 30 años dedicándonos a este tipo de reformas. No dejamos nada al hacer, analizamos el espacio antes de llevar a cabo cualquier intervención y ofrecemos soluciones personalizadas a qué hacer con los azulejos: se puede pintar, usar paneles decorativos, azulejar de nuevo o pensar en un nuevo espacio. Ponte en contacto con nosotros y descubre lo que te podemos ofrecer.